Navidad tiempo de ser con Jesús
Nadie desea estar enfermo. Pero la enfermedad es una posibilidad y muchas veces una realidad en la vida de todo ser humano. No hay ser humano que no haya enfermado alguna vez. Felizmente muchas veces son situaciones simples, que no dejan mayor huella. Pero a veces nos toca enfrentar la incertidumbre, la posibilidad de la muerte, la posibilidad de hacernos dependientes, frágiles, débiles.
Es en la época de Navidad donde es más difícil aceptar la enfermedad. El sentido común nos podría hacer pensar que una época de paz y amor no debería ser una época en la la gente pueda sufrir, pueda morir.
Pero Jesús no nació en un palacio, ni tuvo una cómoda cuna, nació en un pesebre. Pero un pesebre donde hubo algo muy especial: El amor de sus padres y el Amor de Dios que se encarna en Jesús.
La enfermedad puede convertirse en un pesebre. Hace frío, no es un lugar cómodo, pero es el sitio que escogió Dios para que naciera su Hijo. La enfermedad es una oportunidad, una oportunidad para que la Fe y la Esperanza se junten para que uno pueda aprender a amar aceptando su pesebre. Una oportunidad para ser otro Cristo a quien los demás puedan visitar.
La enfermedad es una oportunidad para ser con Jesús, y es en Navidad cuando el misterio de la encarnación puede llenar y transformar la vida de alguien enfermo si abre su corazón.
Quien visita a un enfermo, es a Jesús mismo a quien visita. Ojala todos los enfermos pudiesen entender este misterio. Así la enfermedad tiene un sentido. Que esta Navidad quienes padecen alguna dolencia y lean estas lineas recuerden que se trata de ser con Jesús.
No hay comentarios:
Publicar un comentario