Como en FamiliaAcabo de regresar de un viaje (siempre es importante aprender cosas nuevas y un congreso médico te da la oportunidad de estar al día con lo último). He tenido tanto trabajo últimamente que decidí tomarme un día libre para descansar. Un gran amigo de mi hermano vive cerca de donde fue el congreso y me dio hospedaje para mi último día.
El primer detalle fue su mail: el mensaje decía “A mi hermano”. El es como otro hermano para mi hermano pues son de esos amigos de verdad que lo comparten todo. Yo me sentí algo emocionado por lo que decía el mail. Se sentía una cercanía y una acogida especiales. Me quedé el último día de mi viaje en su casa. Conocí a su familia, a su esposa, a sus hijas, además de la simpática mascota. Salimos de compras, cenamos recordando viejos tiempos …y de pronto la conversación termino en lo esencial, en lo importante, en los ideales, en los sueños…y en la fe. Esa cercanía sentida a través de sus palabras en el mail se convirtió en una cercanía aun más plena, una hermandad espiritual. Al día siguiente nos despedimos, y sé que de verdad tengo un nuevo hermano, no solo en la fe, sino que también en la esperanza y en esa unión que da el amor fraterno. Que suerte encontrar amigos así, hermanos así.
Sin duda uno se siente en familia. Aprendamos a ser hermanos de quienes están cerca nuestro, compartiendo lo importante. Sin duda el mundo sería diferente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario